Los hilos tensores son una nueva y revolucionaria técnica anti aging no quirúrgica que mejora la flacidez y estimula la producción de nuevo colágeno. Por una parte elevan los tejidos, sustentan, tensan y estiran (sobre todo cuando el hilo tiene prolongaciones que se adhieren a la piel), y por otra parte hacen recuperar y estimulan la regeneración de la piel mejorando su elasticidad, además de mejorar la microcirculación y las cualidades de la piel. Aunque no sustituyen un lifting quirúrgico, los hilos son un tratamiento complementario.
Es un tratamiento muy efectivo tanto en hombres como en mujeres.

Son hilos de Polidioxanona PDO bio reabsorbibles. Se trata de un material muy seguro que se emplea en las suturas cardíacas.

La colocación debe ser estratégica según la anatomía y en el sentido adecuado, hay que favorecer la fabricación de colágeno pero en la dirección adecuada. El número de hilos utilizados variará en función de las condiciones de cada paciente, y el éxito del resultado depende no sólo de la capacidad de regeneración tisular individual, sino también de la forma de colocación, lugar y distribución. Los hilos de polidioxanona (PDO) se depositan en la piel a través de una fina aguja en la que van montados, para ejercer un efecto de sustentación, sin necesidad de puntos de anclaje ni sutura. Se distribuyen de diferentes maneras y formas, cómo si se tratara de pintar la piel por dentro con unos finos hilos dirigidos, mediante vectores, a donde queremos que se renueve y se forme nuevo colágeno para estirar la piel y recolocar los tejidos caídos. Los hilos se introducen a través de unas finas agujas que hacen que se tolere bien la manipulación, que en muchas ocasiones no requiere anestesia tópica.

El procedimiento es muy tolerable, rápido y no tiene más molestias que un relleno.

La colocación debe ser estratégica según la anatomía y en el sentido adecuado, hay que favorecer la fabricación de colágeno pero en la dirección adecuada.

El número de hilos utilizados variará en función de las condiciones de cada paciente.

Para corregir los signos de flacidez. A partir de cierta edad, la piel pierde su elasticidad y comienzan a notarse los primeros signos de envejecimiento como hiperlaxitud de la piel, así como flacidez y descolgamiento de la piel en zonas determinadas como los brazos. Hay que tener especial cuidado, por ser mal respondedor en caso fumadores y de exponerse en exceso al sol.

En cualquier momento del año, sabiendo que después hay que protegerse del sol.

Los efectos biológicos comienzan a apreciarse a partir del primer mes, se consolida a los tres y duran hasta doce y dieciocho meses.
Aunque los hilos insertados se reabsorban al cabo de 5 – 6 meses, sus efectos persisten, debido a que el hilo ha sido sustituido por nuevo colágeno.
A los 3 meses se pueden apreciar los efectos finales que duran aproximadamente 12 – 18 meses.

Los hilos son poco agresivos y la recuperación después del procedimiento es rápida.

Durante los 15 días siguientes al procedimiento se debe cuidar la limpieza y desinfección diaria, evitar masajes y movimientos bruscos, no presionar en las áreas tratadas. Se puede reponer en cualquier momento y hacer sesiones por regiones y repetir cuando sea necesario. Igualmente, se pueden complementar con otras técnicas: mesoterapia, láser resurfacing, etc., para optimizar resultados.